Lavanda, cuidados de esta planta medicinal y decorativa

Descripción de la lavanda

• Nombre común: lavanda, alhucema, espliego o cantueso
• Origen: Mediterráneo
• Familia: Lamiaceae
• Luz: Pleno solUbicación: exterior
• Temperatura mínima: -15 ºCRiego: moderado

Características de la lavanda

Con sus hojas aromáticas que desprenden sutiles aceites esenciales y sus flores campestres perfumadas, la lavanda resalta en cualquier entorno en el que se encuentre. Originaria de la costa occidental mediterránea, este arbusto exclusivo despliega su encanto en una región única del mundo.

El género Lavandula pertenece a la familia de las lamiáceas y cuenta con una treintena de especies conocidas por los términos lavanda, alhucema, espliego o cantueso.

Estas se engloban en una amplia gama de tamaños, colores y formas de flor. Algunas de las más conocidas son la Lavandula stoechas, la Lavandula dentata, la Lavandula latifolia, la Lavandula multífida y la Lavandula angustifolia o Lavandula officinalis, la más cultivada.

¿Sabes de dónde viene el término de esta última? El nombre de Lavandula proviene de la palabra en latín lavare, que era donde los romanos ponían las flores de la lavanda para aromatizar sus baños. Officinalis, por otro lado, en castellano significa oficinal, haciendo referencia a toda planta que se use como medicina según la RAE.

De izq. a drcha.: Lavandula stoecha, Lavandula latifolia y Lavandula angustifolia

Si estás interesado en cultivar una lavanda en maceta, una de las más compactas y recomendadas es la Lavandula angustifolia, especie tradicional inglesa con oscuras y aromáticas flores de color morado y hojas de color gris plata.

La lavada es un subarbusto de tallos rastreros muy retorcidos que puede llegar a crecer hasta un metro de longitud. Su inflorescencia morada, que surge entre primavera y verano, es la razón de su increíble popularidad.

Cultivo de lavanda

Para resaltar y potenciar la belleza de la planta lavanda, es importante tener en cuenta los siguientes consejos:

Luz y ubicación

El clima ideal para cultivar la lavanda son las ubicaciones costeras, lugares en donde haya mucho sol y poca lluvia. Debe recibir, al menos, unas 6 horas de luz solar directa al día. Si la vas a tener plantada directamente en el jardín, analiza que ningún árbol le pueda hacer sombra o no prosperará.

La lavanda se puede encontrar cultivada desde casi el nivel del mar hasta altitudes de casi 2400 metros. A mayor altitud, la planta desarrollará un aroma y esencia más intensos.

Aunque la mayoría de las variedades se pueden dejar fuera todo el año, es conveniente resguardar de las heladas las más delicadas.

Riego

Aunque la lavanda es una planta resistente a la sequía, necesita una pauta de riego para que prospere y florezca de forma adecuada, sobre todo, si encuentra plantada en maceta.

Deberás incrementar el riego en verano y reducirlo considerablemente en invierno, ya que la unión de frío y humedad podría llegar a congelar la planta.

Trata de no excederte con el riego, ya que podría resultar en el pudrimiento de las raíces y, en última instancia, en la muerte de la planta. Para ello, procura que el suelo tenga un buen drenaje.

Suelo y abono

La podemos encontrar tanto en el campo como en el jardín. Se utiliza mucho en la xerojardinería ya que crece muy bien en terreno arenoso arcilloso, pero también silicio. En general, al ser tan resistente, se adapta bastante bien a todo tipo de suelos.

No es una planta que necesite ser abonada, de hecho, en ocasiones puede llegar a ser contraproducente. Pero, si el suelo en el que está plantada es algo pobre, agradecerá una mezcla gránulos de fertilizante de liberación lenta en la superficie del sustrato en primavera.

Plagas y enfermedades de la lavanda

Aunque la lavanda es bastante rústica frente a plagas y enfermedades, ocasionalmente puede verse afectada por pulgones, el escarabajo del romero o el crisomélido, capaz de arrancarle las hojas. Es fundamental realizar inspecciones periódicas de la planta y, si fuera necesario, aplicar métodos orgánicos o pesticidas suaves para controlar dichos problemas.

Puedes que lo desconozcas pero existen sencillos consejos para prevenir la aparición de insectos como pulgas, gusanos y hormigas en la planta. Algunos de ellos son tan simples como colgar peladuras de plátano y naranja sobre sus ramitas. Como ves una medida simple pero eficaz. Maxi Gutiérrez de La Botica te muestra más trucos caseros para el mantenimiento de la lavanda.

Poda de la lavanda, ¿es necesaria?

Sí, salvo que no te importe que tu lavanda desarrolle una masa de tallos largos, leñosos y poco atractivos. La poda es un paso fundamental para mantener una planta compacta, espesa y floreciente.

Suele ser recomendable que después de la floración la recortes un poco para que no se espigue mucho. Tendrías que cortar la parte de la espiga y un poco más. Haciendo esto, estarás favoreciendo que la planta genere nuevos brotes.

A finales de febrero (hemisferio norte) es cuando se recomienda realizar una poda de formación para que, de cara a la primavera, esté lista para florecer nuevamente.

Reproducción

Se propaga mediante semillas en la naturaleza, pero la mejor forma de multiplicarla nosotros en mediante esquejes, sobre todo esquejes leñosos que tengan un poco de base (de talón). La mejor época para la reproducción de la lavanda es la primavera.

Curiosidades de la planta lavanda

Se puede cultivar como elemento individual y en conjunto para formar setos y borduras. Habitualmente se cultiva por la belleza de sus flores y por la esencia que posee.

La lavanda es una planta medicinal especialmente famosa sus propiedades calmantes, ideal para heridas y quemaduras. Su aroma, de hecho, es tan único e inconfundible que ha convertido a esta planta en la joya por excelencia de la aromaterapia.

Gracias a su agradable olor suele usarse como base para hacer ambientadores naturales para la casa o para repeler las polillas del armario, aunque en este último caso, verá incrementado su poder si se combina con romero y ajenjo. Aprovecha las flores sobrantes de la poda para hacer unos saquitos aromáticos.

Pero la lavanda no solo tiene utilidades dentro del hogar, también fuera. Juanjo Rodríguez, hortelano del blog Diario Dun Neno Labrego explica que es una planta aromática beneficiosa para el huerto y el jardín ya que, gracias al aroma que desprende, atrae a una gran cantidad de insectos beneficiosos. La lavanda, de hecho, es conocida por ser una de las principales plantas melíferas.

Añade que es estupendo para combatir las hormigas del jardín por lo que, si plantas algunos ejemplares alrededor del huerto, es casi seguro que estas acabarán buscando otro lugar menos incómodo. Otras aromáticas con propiedades similares a la lavanda son la salvia y el romero.

Lavanda en la decoración del hogar

La versatilidad de la lavanda no se limita solo a su utilidad medicinal y aromática, también es una opción increíble para embellecer tu hogar. A continuación, te mostramos algunas ideas creativas para decorar con esta fragante planta, las cuales, estamos seguros de que recibirían elogios de nuestros compañeros de Decogarden.

Desde elegantes arreglos florales en jarrones de cristal hasta coronas, guirnaldas y centros de mesa con ramitas de lavanda. Estas creaciones no solo son visualmente bonitas, sino que también impregnan el ambiente con la deliciosa fragancia de la lavanda.

Puedes dar un toque único a tus regalos envueltos utilizando ramitas de lavanda atadas con cintas o crear marcos y cuadros decorativos utilizando flores secas o preservadas. Saca a la luz tu lado más creativo y aprovecha la belleza y el aroma de esta planta en tu hogar.